Biagetti compartió estos conocimientos desde su propia experiencia, “he dedicado mucho tiempo a tratar la complejidad del desarrollo económico en Latinoamérica y a encontrar formas de compartirlas y significar contenidos que mejoren la interpretación de la realidad”, afirmó. 

Expuso algunas ideas en torno al desarrollo económico inclusivo. En base a esto destacó tres elementos básicos que movilizan el desarrollo: “Una situación profunda insostenible, una situación de utopía y una situación de la cual no se retorna. Estos tres factores tienen que llevar a la movilización y  a un cambio de situación” destacó Biagetti. Sin embargo, “hoy encontramos comunidades que tienen una capacidad de soportar situaciones extremas, lo que increíblemente termina siendo un problema, porque se tolera esta situación.” 

Desde su experiencia en INTI, como coordinador del Programa Cadenas de Valor, destacó la importancia de agregar valor a la cadena productiva. Esto no implica necesariamente “agregar precio” sino que para agregar valor “hay que hacer un esfuerzo”. Es en este esfuerzo donde se sugiere trabajar con las comunidades. “La propuesta de ir construyendo la economía del bien común es empezar a pensar cómo en la transacción puede haber satisfacción para la oferta”.

Participaron en el encuentro representantes de organizaciones de la economía social. Por la UNCUYO, el Programa de Economía Social del Instituto de Trabajo y Producción y el Centro de Estudios de Economía Social de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Asistieron además el Espacio Intersectorial para la Promoción de la Economía del Bien Común, El Arca Mendoza, la Caja Cooperativa de Crédito , Cáritas Mendoza, Red de Bancos Populares, Valos, INTI, el Centro Ecuménico Carlos Mujica, el Grupo de Voluntariado Universidad Nacional de Villa María, el Arca Córdoba, el Arca Neuquén y el INCIDE Córdoba.