Escritora, dramaturga, librepensadora, atea y feminista, Susana Tampieri tuvo una formación formal como notaria y traductora de inglés; sin embargo desplegó toda su creatividad en el campo cultural de nuestra provincia y lo hizo con una gran conciencia política. Fue autora de más de 30 obras teatrales, entre ellas "Cantando las cuarenta", representada a lo largo de tres décadas en diversos escenarios del país y del exterior. También editó dos novelas: "Nadie muere del todo en Praga" y "De polen y cenizas". Escribió ensayos, poemas, cuentos y numerosos artículos que se encuentran repartidos en antologías, textos de estudio y periódicos. Sus obras fueron acompañadas de sendos premios y menciones, pero también del reconocimiento público.
Susana Tampieri fue, además, una enorme luchadora por los derechos humanos de las mujeres. Por esta razón, no dudó en acompañar las gestiones para la creación del Instituto de Estudios de Género y Mujeres, y se mantuvo cercana siempre al mismo, realizando actividades conjuntas y asistiendo cada vez que era convocada. Claudia Anzorena, actual representante del claustro de Graduades en la Comisión Directiva del IDEGEM, recuerda que “la conocí en el 2.005, cuando me adentraba en el feminismo y empezábamos con acciones de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito. Ella para mí representaba los Derechos Humanos, la historia, era de esas mujeres que despliegan historia posta, y a mí me encantaba escucharla hablar”, y destaca que “sabía tanto, que yo le pasaba siempre mis textos para que me los revisara y un día la conocí como dramaturga y me pasó una obra, en particular, de la que me enamoré... "Gineceo" obra que Gerardo Buby Saavedra ha sabido llevar al escenario en varias oportunidades. La Tampieri era todo eso y mucho más, mucho más que no conocí y mucho que guardaba para sí. Hermosa, admirable, cultura, historia, militancia, letras, genia”.
Susana escribió 35 cartas a les lectores de Diario Los Andes, en donde reclamaba para las mujeres el derecho a decidir, mayor autonomía y la ansiada igualdad de género. Alejandra Ciriza, fundadora del Idegem también despide a Tampieri con estas palabras: “Susi, te vamos a extrañar. Tu respuesta rápida, tu capacidad de reírte de todo, tu escritura precisa y filosa en la defensa de tus convicciones. Tus convicciones laicas, tu dignidad de atea, que defendiste tantas veces. Con audacia y valentía. Ante quien rayara. Tus palabras preciosas en la novela y la divulgación de tus ideas. Tu confianza y alegría en la amistad entre mujeres. En la maravillosa experiencia de escucharse y reírse en esa clave que nos ha sido negada durante tantos siglos”, finalmente Ciriza hace una emotiva evocación: “En nombre de nuestra amistad feminista y de nuestras convicciones compartidas en defensa del laicismo y del aborto, te abrazo infinito. Habremos de encontrarnos en alguna galaxia en la que nos reiremos juntas e irreverentes”.
Tampieri fue también promotora de la Sociedad Ética Argentina Deodoro Roca, desde la cual impulsó sus ideas de librepensamiento y laicidad. Nos duele enormemente su partida, pero nos queda su legado, al que este Instituto seguirá honrando y manteniendo vivo en cada tarea y en cada lugar donde todavía quede por conquistar un derecho.
Artículo relacionado: Susana Tampieri en el IDEGEM "Construir colectivamente un espacio de amistad política feminista" Por Alejandra Ciriza